CONCLUSIONES ARTE COMUNITARIO, ENSEÑANZA Y TRANSFORMACIÓN SOCIAL
CONCLUSIONES ARTE
COMUNITARIO, ENSEÑANZA Y TRANSFORMACIÓN
El arte comunitario implica la participación grupal en el proceso de construcción de la
obra de arte, pero en si es una intervención a una colectividad y un intento
para lograr abordar y/o resolver una problemática social a través del
arte, envolviendo la
participación activa del grupo en un proceso creativo, que se realiza mediante la integración,
apropiación y desarrollo de
pensamiento crítico de los participantes de
la comunidad.
Por otra parte, el fin del arte colaborativo no es la transformación del
individuo o grupo sino la participación en la parte estética de todo este
proceso realizada por el colectivo. En este sentido, las prácticas colaborativas
se centran en entender los modos de colaboración y negociación ya que se ve la
participación de trabajadores culturales
(ya sea artistas visuales, cineastas, documentalistas, arquitectos,
diseñadores, etc.) y diversos colectivos y redes locales (las comunidades) que
durante un tiempo/espacio comparten unos temas y generan una serie de
procesos sociales como la integración, lo que normalmente se ejecuta
por medio de talleres.
Por todo lo anterior, se puede concluir que el arte comunitario puede entenderse como un proceso o didáctica de
enseñanza, siendo un verdadero motor de transformación social, que forma
sentido de pertenencia en el grupo, trabaja el contexto y necesidades
reales, para que sean los mismos
miembros del colectivo (a través de la
reflexión, de su interioridad y del desarrollo del pensamiento crítico), los
que encaminen experiencias
significativas por medio del arte.
Esto es lo que lo diferencia del arte
colaborativo, que sólo encamina a la comunidad a elaborar una obra por medio de
múltiples estrategias, quedándose en la parte práctica, pero no en lograr un
cambio de fondo, un cambio interno en la
colectividad y el individuo.
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